cuidando de tus espacios de introspección y reflexión.
1. LISTA DE TAREAS te propongo que cada noche escribas una lista con las tareas para hacer al día siguiente siendo absolutamente sensato respecto a lo que es importante. Esta lista te ayudará no sólo a ser más específico respecto a las responsabilidades que deberás afrontar, sino que también te permitirá aliviar la ansiedad que implica afrontar una nueva jornada de duelo.
2. PEQUEÑAS METAS. No importa cuán pequeña sea la tarea que quieras hacer, a veces hasta lo más sencillo se vuelve en una carga demasiado pesada en este momento. Reduce la velocidad y baja tus expectativas. Necesitas tiempo para recuperarte… respeta tus ritmos, ya tendrás tiempo para hacer las cosas como solías hacerlo.
3. PRIORIDAD. ¡No puedes resolver diez cosas a la vez! Durante el proceso de duelo, el cuerpo nos envía constantemente señales de que debemos reducir nuestro paso. Es normal que por un tiempo no puedas hacer la misma cantidad de cosas que solías hacer antes de que se produjera la pérdida de tu ser querido.
4. DESCANSOS. Durante el día hay momentos en los que solemos tener niveles más bajos de rendimiento físico e intelectual. Cuando te sientas cansado, no dudes en tomarte unos minutos para distenderte. Escucha las señales de agotamiento que te envía tu cuerpo y baja tus niveles de exigencia.
5. AYUDA. Muchas veces nuestros seres queridos quisieran ayudarnos pero no saben cómo hacerlo por lo que cuando un familiar y/o amigo se te acerca para preguntarte ¿Qué puedo hacer para ayudarte? No dudes en solicitarle soporte para afrontar algunas tareas cotidianas durante las primeras semanas de duelo. No sientas vergüenza por mostrarte agotado ni culpa por acaparar la atención de los demás… tú harías lo mismo por ellos si te necesitaran. Por ejemplo, pueden pasar por tus cuentas e ir a pagarlas, llevar los niños al colegio, hacerte la comida de toda la semana o bien traerte las compras del supermercado.
Ten paciencia contigo mismo y procura poco a poco retomar aquellas tareas cotidianas que formaban parte de tu rutina diaria. Deseamos que estas estrategias te ayuden a aliviar la pesada carga de estos quehaceres en esta etapa tan especial por la que estás atravesando.
Fuente: Manejo del Duelo