Gila Ma. Acevedo de Padilla, a 10 años de tu partida, hoy te recordamos desde diferentes voces.
Querida Madre, gracias a tu testimonio y enseñanzas se funda Apoyo Integral Gila A.C, la cual nos ha llenado de alegría, orgullo y muchas enseñanzas.
¡Abrazos hasta el cielo!
Te compartimos las cartas que tres de tus nietas escriben.
Abuela Tita,
Han pasado diez años desde tu partida…
Creo que puedo hablar por parte de todos los miembros de la familia al decir que tus recuerdos siguen viajando por aquí, la princesa maya, madre de seis, abuela de doce, amiguera, ocurrente y el ejemplo encarnado de la valentía y la persistencia.
Te habla la nieta más chica de toda la familia Padilla Acevedo, esa niña que no conoció tu voz, ni tu risa o tu caminar; pero la que recuerda con claridad tu sonrisa, tu alegría por la familia, tu amor por Lolo y tu cariño tras tu huipil yucateco.
No conocí mucho de ti, pero, ¡cuánto me has enseñado!
Hoy que estamos juntos para recordarte, te quiero contar que a consecuencia de tu enfermedad se ha fundado una asociación de ayuda llena de cariño, me encantaría que estuvieras aquí para verlo de cerca y sentirte tan orgullosa como yo.
A todos nos faltó tiempo contigo Tita, pero recuerda que sean diez o cien años de tu partida, tu ejemplo y tu corazón trascenderán los límites del tiempo.
Con todo el cariño del mundo,
– Jimena Díaz Padilla
Para Tita, Nuestra Guerrera Maya
Diez años desde que no estás en carne y hueso, porque en alma aquí sigues y nunca te fuiste.
Hoy te quiero agradecer porque nos dejaste la herencia más bonita y especial que puede recibir una familia, un testimonio de vida.
Un testimonio de lucha, de fortaleza, de entrega y dedicación, de amor sin medida, de sencillez y valentía. Un testimonio que hoy se refleja en la asociación que orgullosamente lleva tu nombre.
¡Vaya, que ejemplo de mujer!
Te extrañamos aquí abajo, pero me quedo tranquila que allá arriba, a un lado de Lolo, tu cubanito de ojo azul, estás cuidándonos e intercediendo por nosotros.
Gracias Tita porque nos enseñaste que en momentos de tempestad, hay que ver pequeños los problemas y muy grande a Dios.
Un beso grande al cielo,
– Valeria Padilla.
Querida Tita,
Hoy se cumplen 10 años desde el día que te volviste un angelote para toda la familia y a su vez una enorme vacío. Hace 10 años yo no notaba muchas cosas ni pude conocerte mucho porque te nos fuiste cuando yo todavia estaba chiquita pero aun así se me hace increible el impacto que causaste en mi vida, los recuerdos que tengo de ti, el amor y cariño que te he tenido y te tendré siempre. Fuiste una mujer con millones de cosas que admirar y un verdadero ejemplo y nos dejaste lo mas preciado que existe, tu mejor herencia y en lo que mas te destacaste, la familia Padilla Acevedo, la hermosa familia que formaste, 6 hijos dispuestos a hacer y dar todo por su familia y con un corazón enorme y todo eso lo aprendieron de ti. Todo eso nos lo heredaste a 12 nietos y eso será tu herencia para toda la vida.
Me hubiera encantado conocerte mas y disfrutarte mas, pero se que te fuiste a un lugar mejor, donde encontraste paz y felicidad y donde unos años después te volviste a encontrar con Lolo, el amor de tu vida. Las historias que mi papa y mis tíos nos cuentan de ti son pequeñas historias que verdaderamente ademas de causarme mucha gracia por todas tus locuras y ocurrencias, hacen que cada vez crezca y se fortalezca mi cariño y admiración hacia ti.
Fuiste y serás siempre una hija, hermana, mama, esposa y abuela muy extrañada y muy querida. Fuiste y eres inspiración de muchos y para lograr mucho en tu nombre se hicieron cosas increíbles y cosas trascendentales que logran ayudar y cambiar la vida de muchas personas. Dejaste mucho cuando te fuiste, pero lograste mucho mas cuando estuviste.
Te agradezco inmensamente el ejemplo que siempre fuiste, de lucha, amor, alegría, fuerza y valentía. Nunca te diste por vencida y seguiste luchando hasta en el peor momento. Gracias por la familia que formaste, gracias por las personas que conmoviste, gracias por la herencia tan grande que nos dejaste, te extrañamos todos los días y tu memoria vivirá con nosotros para siempre.
Te mando un beso enorme hasta el cielo, te quiero mucho.
– Natalia Padilla Yáñez
¡Bomba!
Aunque en Yucatán nació,
Hizo de Teca su casa,
Del tenis y el club su amor
Con ustedes su coraza.
Nos quiso mucho y amo
Y repartió su alegría
Y hasta su muerte gozó
La Yuca Gila María.
¡Bomba!
– Bomba yucateca para Gila