Neuralink, la compañía de Elon Musk dedicada a implantar chips cerebrales, ha recibido la solicitud de miles de pacientes interesados.
La empresa pretende implantar su dispositivo en la cabeza de 11 personas el año que viene: esto es todo lo que se sabe de la cirugía que reemplaza una parte de tu cráneo.
Miles de pacientes potenciales hacen cola para recibir uno de los primeros microchips cerebrales de Neuralink.
Esta startup dedicada a desarrollar una interfaz cerebro-ordenador fue cofundada por Elon Musk en el año 2016 y tiene como objetivo diseñar un dispositivo que permita a las personas hacer cualquier cosa, desde comunicarse telepáticamente hasta jugar a videojuegos usando solo su mente.
Pero, antes de eso, Neuralink ha asegura que espera ayudar a personas con trastornos neurológicos graves para que puedan controlar sus dispositivos electrónicos y comunicarse utilizando solo su actividad cerebral.
En mayo de 2023, Neuralink recibió la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense —FDA, por sus siglas en inglés— para comenzar a realizar ensayos clínicos en sujetos humanos. Unos meses más tarde, en septiembre, la compañía abrió el plazo de solicitudes. Neuralink buscaba voluntarios con tetraplejia o esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
Según publicaba hace unos días Bloomberg, miles de personas se han inscrito para tener al menos una posibilidad de recibir un implante.
La empresa de Musk todavía tiene que completar con éxito la cirugía de implante cerebral en un ser humano. Mientras tanto, esto estodo lo que se sabe acerca del proceso, según los vídeos publicados por la propia Neuralink y diversos artículos publicados en medios de comunicación.
Un portavoz de la compañía no ha respondido a la petición de declaraciones de Business Insider.
El chip tiene el tamaño aproximado de una moneda de diez céntimos.
El microchip está pensado para registrar y transmitir la actividad cerebral del sujeto en el que se implanta.
El dispositivo de Neuralink cuenta con 64 hilos ultrafinos que salen del chip y se adhieren al cerebro.
En total, esos hilos contienen más de mil electrodos.
Los hilos están específicamente diseñados para poder introducirse en el cerebro.
Los hilos del microchip son tan pequeños que su anchura es de aproximadamente una decimocuarta parte del diámetro de un mechón de pelo, según la empresa.
Son demasiado pequeños incluso para ser implantados por una mano humana.
Es ahí donde entra en juego el robot.
El dispositivo solo puede ser introducido en el cerebro por un robot, según Elon Musk.
Neuralink señala que este robot es capaz de manipular los cables ultrafinos e implantarlos de forma que no alteren los vasos sanguíneos del cerebro del paciente.
El robot mide dos metros y medio.
Antes de que el bot pueda insertar el dispositivo, un cirujano humano debe retirar una parte del cráneo del sujeto.
Según las fuentes de Bloomberg, la craniectomía dura “un par de horas”.
Al parecer, el robot tarda unos 25 minutos en insertar el dispositivo.
El dispositivo de Neuralink sustituye a la porción de cráneo que el cirujano había extirpado.
Musk habría dicho que quiere que la cirugía en la que se implanta el microchip dure menos tiempo y que su compañía sea capaz de realizarla en su totalidad sin intervención humana.
En un ser humano, el dispositivo Neuralink está diseñado para colocarse detrás de la oreja.
Mientras que el dispositivo se coloca detrás de la oreja, los electrodos se introducen en el cerebro.
Actualmente, la batería del chip cerebral dura “unas pocas horas”, pero, según Bloomberg, Musk quiere que dure hasta 12 horas.
Por el momento, el dispositivo podría recargarse con una suerte de “gorra de béisbol personalizada”.
Neuralink ya ha realizado más de 150 implantaciones quirúrgicas.
La empresa ya ha utilizado su robot para implantar chips en una amplia variedad de sujetos de prueba animales, incluyendo ovejas, cerdos y monos.
En 2021, Neuralink mostró cómo su tecnología permitía a un mono jugar a un videojuego utilizando solo su mente.
En un vídeo de demostración, un mono llamado Pager jugó con un joystick desconectado de la consola, lo que significa que controlaba el cursor con las señales de su cerebro mientras movía el brazo, explicó Neuralink en su momento.
La startup de Musk recompensó al mono dándole de comer un batido a través de una pajita conectada al monitor del ordenador.
Neuralink ha recibido algunas críticas de los defensores de los derechos de los animales.
El Comité de Médicos por una Medicina Responsable de Estados Unidos presentó una queja sobre Neuralink ante el Departamento de Agricultura estadounidense en 2022, después de obtener más de 700 páginas de documentos relacionados con monos utilizados en investigaciones de la compañía en la Universidad de California en Davis (UC Davis) entre 2017 y 2020.
Este colectivo denunció que esos registros indicaban que los animales que habían participado en las pruebas de Neuralink habían experimentado un “sufrimiento extremo”.
Tanto la UC Davis como Neuralink negaron las acusaciones de que los animales hubiesen sido maltratados. Y la colaboración entre UC Davis y la compañía terminó en 2020.
“En Neuralink, estamos absolutamente comprometidos a trabajar con animales de la manera más humana y ética posible”, defendió la empresa a través de una publicación en su blog.
Fuente: www.businessinsider.es