Stephen Hawking más que un genio de la cosmología, fue un inspirador incansable que, además de desentrañar los secretos del universo, compartió sabios consejos para ser mejor persona.
En el mundo científico pocos nombres resuenan tan poderosamente como el de Stephen Hawking. Físico teórico de renombre que dejó un legado que trasciende las fronteras de la ciencia y su trabajo en la cosmología, en particular con los agujeros negros, lo convirtió en una fuente de inspiración para generaciones futuras.
A la edad temprana de 21 años, a Hawking se le diagnosticó esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad devastadora que ataca principalmente el sistema nervioso y condena a la mayoría de las personas a una vida corta y limitada.
Sin embargo, el científico se negó a aceptar un destino sombrío y ante todo pronóstico desafió sus condiciones con una determinación inquebrantable. A pesar de las predicciones desalentadoras, sobrevivió durante décadas y, aunque su movilidad se vio afectada, nunca permitió que su mente dejara de explorar los misterios del universo.
Su prodigiosa inteligencia fue igualada por su humildad, siendo un hombre de pocas palabras sobre su propio genio. Hawking afirmó que aquellos que se jactaban de sus coeficientes intelectuales eran perdedores. Pero sus logros hablaron más fuerte que cualquier palabra, ya que en 1998 publicó Una breve historia del tiempo.
Un libro que desafió las convenciones al abordar conceptos complejos de la física y hacerlos accesibles para todos, no solo para los científicos. En su trabajo demostró que la ciencia no debe ser un enigma inalcanzable, sino una fascinante aventura al alcance de todos los curiosos.
“Si se descubre una teoría completa, con el tiempo debería ser comprensible para todos, no solo para unos cuantos. De esta manera, filósofos, científicos y gente común, podrán participar en la discusión de la cuestión de por qué es que nosotros y el cosmos existimos. Si se encuentra la respuesta a eso, sería el triunfo final de la razón humana, porque entonces deberíamos conocer la mente de Dios”.
Pero más allá de su ingenio y logros en la cosmología, Stephen Hawking ofreció sabios consejos sobre la vida misma. Su actitud frente a la adversidad fue un ejemplo asombroso de resiliencia y coraje. Si bien enfrentó una enfermedad implacable, nunca permitió que la oscuridad del futuro nublara su disfrute del presente. Incluso, compartió frases para vivir la mejor vida ante cualquier obstáculo.
Frases de Stephen Hawking para perseverar y ser mejor persona
- Para avanzar ante la adversidad: “Sé curioso. Por difícil que parezca la vida, a menudo hay algo que puedes hacer y tener éxito. Importa que no te rindas”.
- La importancia del sentido del humor: “La vida sería trágica si no fuera graciosa”.
- Sobre el universo: “No sería un gran universo si no fuera el hogar de las personas que amas”.
- Lo que hace que los humanos sean únicos: “Somos solo una raza avanzada de monos en un planeta menor de una estrella muy promedio. Pero podemos entender el universo. Eso nos hace algo muy especial”.
- El poder de la comunicación: “El habla ha permitido la comunicación de ideas, permitiendo a los seres humanos trabajar juntos para construir lo imposible. Los mayores logros de la humanidad se han producido hablando, y sus mayores fracasos al no hablar.
- Con la tecnología a nuestra disposición, las posibilidades son ilimitadas. Todo lo que tenemos que hacer es asegurarnos de seguir hablando”.
- El verdadero significado de la inteligencia: “La inteligencia es la capacidad de adaptarse al cambio”.
- La creación de tu propio destino: “Me he dado cuenta de que incluso las personas que afirman que todo está predeterminado y que no podemos hacer nada para cambiarlo, miran antes de cruzar la calle”.
- Sobre el conocimiento: “El mayor enemigo del conocimiento no es la ignorancia, es la ilusión del conocimiento”.
- El poder de la posibilidad: “El viaje en el tiempo solía considerarse solo ciencia ficción, pero la teoría general de la relatividad de Albert Einstein permite la posibilidad de que pudiéramos deformar el espacio—tiempo tanto que podrías estallar en un cohete y regresar antes de partir”.
- Vivir tu mejor vida: “Estos son los consejos más importantes que he transmitido a mis hijos. Uno, recuerda mirar hacia arriba a las estrellas y no hacia abajo a tus pies. Dos, nunca dejes de trabajar. El trabajo te da sentido y propósito y la vida está vacía sin él. Tres, si tienes la suerte de encontrar el amor, recuerda que está ahí y no lo tires”.
El 14 de marzo de 2018, Stephen Hawking, científico muy querido por muchos y una de las mentes más grandes del nuestra generación, falleció a la edad de 76 años. Por su puesto, el mundo lamentó la partida de un genio, pero su legado perdurará para siempre.
Su inalcanzable búsqueda de respuestas, así como su habilidad para compartir la belleza del universo con el mundo, han dejado una impresión imborrable en la humanidad. Hawking no solo enseñó sobre los misterios del cosmos, sino que también recordó la importancia de abrazar la vida con valentía y asombro.
Fuente: computerhoy.com/life