Guía para la ingesta de medicamentos.
1.- Es muy importante tomar los fármacos de pie o sentado (no acostado) y en algunos casos, como en el del ibuprofeno, se debe mantener la posición erguida durante varios minutos. Por otro lado, las grageas y cápsulas deben tomarse acompañadas de abundante cantidad de agua (un vaso y no sólo unos sorbos) y los comprimidos efervescentes y los polvos deben tomarse inmediatamente después de que se hayan disuelto en medio vaso de agua. Sólo se pueden partir las pastillas si tienen una ranura en medio.
2.-No se deben tomar medicamentos que se sospeche que han sufrido algún tipo de deterioro ni que hayan sido manipulados.
3.- Antes (y después) de administrar un medicamento hay que lavarse las manos, especialmente en los casos de aplicación externa, y también debe lavarse la zona afectada.
4.- Antes de empezar a tomarlo hay que informarse de para qué se va a tomar, leer las indicaciones, y de cuál es la dosis, así como las veces que hay que tomarlo al día. Huarte destaca que, por ejemplo, en el caso de los antibióticos es muy importante cumplir las horas establecidas (si son dos veces al día es cada 12 horas, y si son tres veces al día, cada ocho horas, no en cada comida).
5.- Además, hay que atender a la duración del tratamiento, hasta cuándo tomarlo. “Es muy importante cumplir con la duración del tratamiento. No se debe dejar de tomar porque te sientas mejor, ni tampoco prolongarlo porque aún no estés bien”, indica.
6.- A su vez, es importante tener en cuenta cómo hay que tomarlo, si con o sin alimento, o con el estómago lleno o vacío, o en medio de la comida, o justo después; con qué cantidad de agua; si se puede partir; o por ejemplo qué no se debe hacer si no lo dice en el prospecto. “Con las comidas es durante la misma o justo después de comer. A veces es separado de un determinado alimento porque interfiere en la absorción y dejando como mínimo dos horas de espacio entre el alimento y la toma del medicamento. A veces es mejor medicamentos con agua y sin leche, separarlo dos horas del medicamento. Hay que informarse y preguntar de cómo tomarlo”, apostilla la farmacéutica.
7.- En el caso de que se tome un medicamento sin que nos lo haya prescrito un médico siempre hay que ingerir la dosis más baja. Por ejemplo, en el caso del ibuprofeno si nos duele la cabeza, tomar siempre la dosis de 400 y no la de 600 si es automedicación, y además hacerlo durante el menor tiempo posible. También destaca la importancia de no sobrepasar la dosis mínima diaria recomendada que viene en el prospecto.
8.- Sobre los efectos adversos, Huarte pide no agobiarse y atender bien a las indicaciones del prospecto. “Hay que comentárselo al médico porque puede buscar alguna alternativa. Tener en cuenta que los efectos adversos suelen darse al principio, mientras que el medicamento se adapta al organismo, y no siempre pasa”, añade la miembro de la SEFAC.
9.- Estando embarazada no se pueden tomar medicamentos, salvo prescripción médica. En el caso de ser madre lactante, lo mismo, salvo prescripción médica.
10.- Evitar el alcohol durante cualquier tratamiento.
11.- Sobre la conservación de los medicamentos, hay que guardarlos en sitio fresco y seco y que no le dé la luz, ni la de la ventana, porque se pueden estropear. Fijarse en las indicaciones de conservación que dicta el envase. Siempre en lugares limpios, frescos y secos. La cocina y el baño no son lugares apropiados para conservarlos. “Unas malas condiciones de conservación pueden convertir los medicamentos en ineficaces y añadir riesgo de efectos indeseados, por eso también hay que mantener los fármacos dentro del envase original, protegidos de la luz, y en caso de usar pastilleros, conviene recortar los blíster para mantener las pastillas protegidas e identificadas”, agrega.
12.- Eliminar siempre en el punto SIGRE que hay en todas las farmacias. “Cuando terminas un antibiótico y sobran tres pastillas tíralas en la farmacia, igual que con los colirios, o si se caducan los medicamentos”, indica.
13.- En caso de vomitar el fármaco tras tomárselo es importante en el caso de los anticonceptivos tomar precauciones. Si se trata de otro medicamento y ya han pasado una media hora desde su ingesta no hay que preocuparse porque previsiblemente el cuerpo ya lo ha absorbido. No obstante, si no ha pasado esa media hora conviene volver a tomarlo. Eso sí, en caso de duda, preguntar a un especialista siempre.
14.- Si se ha olvidado una dosis, y cuando te das cuenta se está muy próximo a la hora de la toma hay que tomarla. No obstante, si se está muy próximo a la hora de la siguiente toma, esperar a entonces y saltarse la que nos hemos olvidado.
Fuente: Tribuna Salamanca / Infosalus